Cuando viajè al coco planeta


Cuando tenía 15 años, a mi papá lo invitaron a la NSA y tenia que llevar a un acompañante. Recuerdo muy bien cuando el me hizo la invitación para que yo lo acompañase. Yo, muy emocionado, le conteste que si. Después de contestarle. Le pregunte a que íbamos y el solamente sonrió.


Era tanta la emoción de ir a la NASA y no saber a que, y en ese momento le pedí a mi mami que me ayuadara a hacer mi maleta. En esa llevaba de todo. Luego le comente a mis compañeros de la escuela sobre el viaje, y ellos se emocionaron tanto que me encargaron recuerdos de la NASA.


El día se llego. Cuando papá y yo llegamos a la NASA, yo era el más emocionado. Un rato mas tarde nos entregaron los trajes de astronautas, nos dejaron que nos los pasáramos, así lo hicimos.


Después nos llevaron a un cohete que nos transportaría al coco planeta. Yo me sorprendí y no lo podía creer pero era cierto; ya vestidos de astronautas y muy bien equipados, estábamos listos para despegar. A lo lejos, una vez que contaba: cuatro, tres, dos, uno... despegue.


Pasamos por todo el mundo, llegamos al universo. Cuando estábamos allí se veían muy grandes colocar un robot pues esa era la misión. El planeta al cual teníamos que ir se encontraba muy lejos y era difícil de distinguirlo, pero llegamos.


El cohete se introdujo en el planeta, el cual era color café con verde, no era del todo redondo. Aterrizando en el océano del planeta, por que estaba inundado, no había otro lugar para poder estabilizarnos. Papá no quiso salir a colocar el robot, me pidió que yo lo hiciera. Yo salí del cohete, he hice un viaje por el coco planeta; Con mi traje de astronauta volaba por los aires. Era muy grande y todo color blanco, como las nubes del planeta tierra. Su superficie, completamente cubierta de agua, un agua no muy clara. Se veía como color gris, no se movía, estaba muy tranquila, no era como el mar de mi planeta.

Recorrí el planeta por horas y horas. De pronto sentí hambre y no veía nada más que el agua de la superficie y el enorme cielo que parecía coco. Aproveche que nada me veía, y mientras colocaba el robot en su lugar. El pedazo blanco que tenia en mis manos, lo lleve hacia mi boca y lo comí. Me gusto mucho que ahí supe que era coco, el coco planeta era un enorme coco grande, y yo estaba ahí.

Regrese donde papá. No quise contarle nada. Salimos de coco planeta hacia el universo y luego hacia la tierra. Llegamos, yo iba emocionado en el camino a casa. Cuando estábamos en la puerta, le grite a mi mamá. Ella salió a recibirlos y tampoco le conté, porque la abuela decía que una cosa que has vivido y querías repeti

2 comentarios:

Antonio Valencia dijo...

Hola William Josué. Hey me gusta tu texto y tu blog. La verdad es que cargas con una gran responsabilidada pero al mismo tiempo se que va a ser una experiencia que te va a ayudar a crecer mucho como persona.Exitos.

uno mas del monton dijo...

Hola William Josué. Me gustó la forma tan madura en la que tomaste esta responsabilidad. Está bonito tu blog.

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